La guía potórrica sobre Tailandia

Cuando planteas un viaje a un pais exótico la primera y a posteriori clave, decisión que se toma es de que fuente turística fiarse. Todo quisqui se tira a los brazos de la Lonely Planet la cual tiene una putada, que es el efecto Lonely Planet, genialmente retratado por Mauro Entrialgo.

¿Que se puede hacer entonces? ¿Lanzarse al conocimiento fragmentado de la red? ¿Agencia de viajes? ¿El primo de tu cuñado que una vez fue a Andorra y sabe de extravagancias?

Pues en el caso de Tailandia está claro. Hacernos caso a nosotros. Si y solo si cumplis determinadas condiciones.

1. Que no tengais demasiada pasta para gastar.
2. Que no os mole el borreguismo, pero que tampoco seais fundamentalistas de lo alternativo.
3. Que nos seais puteros y/o gambiteros comunes.

Si estaís dentro de estos requisitos, permitidme daros la bienvenida a la primera guía turística potórrica que te va a decir lo que está bien y lo que está mal en Tailandia. Desde nuestro punto de vista, ende luego.

1. Bangkok

Hay que empezar por la capital, porque es la capital y porque la mayoría de vuelos internacionales llegan allí. Asi que queramos o no nuestro viaje empezará en Bangkok.

A aquellos que hayan visitado Bombay, Mexico D.F o Ferrol, esta ciudad les parecerá un dechado de virtudes en lo que a urbanismo sostenible, tráfico y polución se refiere. Los demás pensarán que quizá deberían haber tomado un vuelo para Bagdag o Kandahar.

Si se quieren placeres urbanitas (compras, masajes, bares...) es mucho más recomendable la norteña Chiang Mai. Así que desde el potorrismo recomendamos minimizar la visita en la medida de lo posible. Ah y no pisar bajo ningún concepto el típico-tópico de los bodypackers: Kao Sahn Road.

Bangkok: modernidad y tradición

2. Putiferio

Manolo y Omar (dos de los cinco que hemos hecho el viaje) han cruzado el charco en dos ocasiones. Para ir a Cuba y a Tailandia. Y jamás se han ido de putas. ¿Que clase de persona son?

Para el putero comun serían gilipollas, pues la cantidad y baratura del putiferio en Tailandia es brutal. Tan anodado me hallaba ante el fenómeno que me compré este libro que recopila cartas de los puteros a las pilinguis.

Sin quitarle sordidez, y en muchas ocasiones dramatismo, al asunto, parece ser que allí las pilonguis no entran en el negocio porque se mueran de hambre, sino porque o tienen que mantener a su familia o porque quieran entrar en el carro consumista. Así mismo parece que la mayoría son trabajadoras voluntarias y que no existen unas mafias tan chungas como en Occidente. Sus mayores problemas: el sida, las drogas y los clientes chungos.

El rollo no es tan tosco como en España por ejemplo. El putero no se acerca y pregunta, ¿cuanto? No. Tiene que hablar con ella, conocerla y luego al final quiza se llegué a un acuerdo. Si las cosas van 'bien' el putero se la puede llevar de vacaciones por el pais, mantener el contacto al volver a su casa e incluso llegar a casarse.

Esto significa que el puterismo no está presente solo en las calles señaladas. Está en el avión, en los templos y en cualquier lugar que la 'parejita' visite. Aunque la mayoría te susciten sentimientos que van desde el asco a la pena, hubo momentos sordidos gloriosos como ese padre e hijo (unos 50 y 20 años respectivamente) con una pilongui cada una (el terapeuta les dijo que compartieran aficiones)

Pilinguismo nocturno: nótese la manoletina que voy a realizar

3. Budismo

Uno de los platos fuertes del país por tres razones: culturales, espirituales y de 'ambientillo'

Culturalmente es una delicia visitar los miles de templos que hay por todo el pais. El oro, el barroquismo y el incienso son el denominador comun de estos lugares. Ah, y que hay que descalzarse.

Espiritualmente las posibilidades son grandes. Hay numerosos programas de meditación con los monjes e incluso hacerte un retiro de unos dias con ellos. Yo fui en Chiang Mai a la Universidad Budista (al lado de la de Medicina fuera coñas) para participar en un Monk Chat. Fui en martes. Es los lunes, miercoles y viernes. Avisados quedan.

De todos modos sino eres timido los monjes que hay por ahi estan encantados de hablar un poquito contigo sobre la impermanencia de todas las cosas, sobre la meditación vipashana o el porque en vez de papel de culo hay una manguerita sórdida en los cagantes. Un servidor, que es muy tímido con los desconocidos, consiguió una profunda conversación con un monje acerca de mi lugar de procedencia y de cuantos dias llevaba en el pais. Revelador.

Como siempre respeto el justo

Dejo las de ambientillo para el apartado de Gente

4. Gastronomía

Prudencia, cautela y pies de plomo.

Es una putada, grande, pillarse una vomitona, diarrea, fiebre o todo junto por ser un jodido zampabollos nada más empezar el viaje. Hagan caso a las recomendaciones de las instituciones y sobre todo tengan cuidado con la comida ambulante.

Ya no es que de asco pillarse todo lo anterior, es el cuerpo de desconfianza que se te queda que hace que todo lo que te recuerde a la comida que te causó la vomitona te dé asco. En nuestro caso, toda la comida tailandesa. Y es una pena porque está buena (aunque se les vaya de las manos el tema especias)

Lo que si hay que comer, pase lo que pase, es la deliciosa fruta y los baratisimos mariscos. Eso si, si te descuidas te ponen un mango con curry raro o unos langostinos con algo que sabe como a Mr.Proper. ¡Asi que cautela!

Esos batiditos, ahhhhh

5. Transporte

Esta sección tiene gran valor para los que si vayan a ir y no esten leyendo esto por aburrimiento.

Bangkok: taxi. Y con taximetro. Pasa de regatear, siempre es mejor el taximetro. Y pasa de los tuk-tuk. El aire está tan contaminadao que puedes morir. En serio.

Chiang Mai: tuk-tuk. Está tirado de precio, los tuktukeros son unos cachondos y si negocioa te lo puedes tener de chofer durante todo un día por poco dinero.

Koh Tao e islas potorricas: motica. Bajo tu responsabilidad. El 83% de los guiris llevan vendas de ostiones con las motitos, y es que los putos british aprovechan el sindios que es Tailandia, para conducir mamaos y sin casco. Si se conduce con prudencia, es el mejor medio de transporte para ver las islas con diferencia.

Ah y por el pais, si se puede, avion, que es poco más caro que el autobus y llega en un momentín.

Muñequito de Michelin en un actitud budista

Dejo los cinco siguientes puntos para el siguiente artículo, para no hacerlo muy chapela.

Ko pun kaaaaaap!