Mi vida sin tomaco
Hoy, o mañana, yo que sé, se cumplen 5 años desde que dejé el tomaco
Harto de potar mis pulmones every sunday, harto de tener las amigdalas más maltratadas que el balón de la champions, harto de oler cual mapache sin duchar, harto de gastarme mis ahorros en cilindros venenosos, harto de que me supieran los besos a col revenida, harto de que me gustaran el 17'3% de los cigarros que me cascaba, harto de mi capacidad pulmonar semifetal, harto de las matanzas fraticidas entre los seguidores de Lucky Strike y los de Chester, harto de los puritos ocasionales, harto de los porros que te dejaban baldaos, harto de la chicha esa de los moros que sabe a perfume de vieja, harto de los mentolados que te dejan estéril, harto de que te pasen un porro y que sean un nevado (vaderetro jocaína!) y sobre todo harto de que la razón fundamental por la que empecé a fumar (ser más guay) resultara ser una estafa, decidí dejar de fumar.
Y a día de hoy, en síntoma, ya no de fortaleza sino de mucha prudencia, no he ingerido humo con ánimo hedonista, sin contar con las vaharadas marihuaneras que te llegan en los conciertos,y en las que, en justicia, tampoco vas a respirar para fuera en ese mismo instante.
Si este alegato no les parece suficiente, permítanme que lo refrende con estas bellas imágenes.
Harto de potar mis pulmones every sunday, harto de tener las amigdalas más maltratadas que el balón de la champions, harto de oler cual mapache sin duchar, harto de gastarme mis ahorros en cilindros venenosos, harto de que me supieran los besos a col revenida, harto de que me gustaran el 17'3% de los cigarros que me cascaba, harto de mi capacidad pulmonar semifetal, harto de las matanzas fraticidas entre los seguidores de Lucky Strike y los de Chester, harto de los puritos ocasionales, harto de los porros que te dejaban baldaos, harto de la chicha esa de los moros que sabe a perfume de vieja, harto de los mentolados que te dejan estéril, harto de que te pasen un porro y que sean un nevado (vaderetro jocaína!) y sobre todo harto de que la razón fundamental por la que empecé a fumar (ser más guay) resultara ser una estafa, decidí dejar de fumar.
Y a día de hoy, en síntoma, ya no de fortaleza sino de mucha prudencia, no he ingerido humo con ánimo hedonista, sin contar con las vaharadas marihuaneras que te llegan en los conciertos,y en las que, en justicia, tampoco vas a respirar para fuera en ese mismo instante.
Si este alegato no les parece suficiente, permítanme que lo refrende con estas bellas imágenes.
Comentarios
Jajaja. Buena demostración gráfica de que no te hace más guay. Y parece que tampoco sirve para eso que es la excusa de muchas mujeres: que ayuda a mantener la figura. Si no, la gorda del bigotón sería delgada y supercool.
Sólo un punto a favor para los estreñidos: La nicotina (como la cafeína o el ácido cítrico) es un laxante natural que te cagas... Nunca mejor dicho!
eso si, es mas facil dejar de fumar cuando gorroneas al resto el tabaco.
;p
yo no estoy harta de nada, tal vez es mi adicción la q me nubla la vista :)