El hombre que se transformó en Sol.

Hace miles de años, cuando el día era todo igual, cuando no había ni mañana ni noche, la luz nació de un joven que se transformó en sol. Según cuenta la leyenda, todo comenzó un día en que el muchacho caminaba por el bosque. Venía desde muy lejos y ya tenía los pies cansados.

- Tengo que encontrar un lugar para descansar. Aquél parece un buen sitio -pensó al ver un enorme y frondoso árbol-. En una de sus ramas dormiré un rato.

Se subió al árbol y quedó sumido en un profundo sueño.Mientras dormía, un grupo de mayas, a los cuales se les habia encomendado un tarea importantisima, se encontraban muy cerca de él. Los mayas transportaban un gran baúl en cuyo interior se encontraba uno de los mayores tesoros de su civilización.

Al encontrarse cansados el grupo de mayas acampó, también, bajo el frondoso árbol.

El joven se despertó con el ruido de sus ronquidos y bajó del árbol. Cuando se disponía a emprender de nuevo su camino, se pércato de que había en el suelo un enorme baúl. No pudo resistir la tentación y lo abrió.Dentro había hermosas ropas, hechas con el más fino algodón y bordados con llamativos colores.

El muchacho comenzo a acariciar los tejidos mientras los mayas seguían durmiendo.En el fondo del arca encontró un hermoso traje rojo y naranja. Se quedó impresionado por su color tan brillante y, emocionado, se lo puso.

- ¡Me queda perfecto, parece estar hecho a mi medida!.

En ese mometno sintió que su cuerpo empezaba a temblar de una forma muy misteriosa, sus pies comenzaron a moverse por sí solos, haciendo delicados y energicos pasos de baile. Cada vez bailaba más rápido y mejor ¡parecía que volaba! Saltaba, hacia piruetas y gritaba, ¡estaba cada vez más descontrolado!

Cuando los mayas se despertarón, no pudieron hacer ya nada por evitar que el joven descubriera el secreto tan preciado que transpotaba. El joven seguía danzando sin parar, alejándose por entre la maleza, hasta legar al borde de un precipicio que separa el cielo de la tierra. Estuvo bailando al filo del abismo hasta que perdío el equilibrio y cayó.Sin embargo, en lugar de precipitarse en el vacío, lo que ocurrió fue que el muchacho, cada vez más brillante, comenzo a volar hacia el cielo.

VOLÓ TAN ALTO QUE ACABÓ POR CONVERTIRSE EN UN CÍRCULO NARANJA Y LUMINOSO QUE RADIABA LUZ Y CALOR A TODA LA TIERRA.

¡SE HABIA CONVERTIDO EN SOL!

Hay quienes dicen que en el corazón del Sol todavía está el muchacho bailando y vigilando que el mundo esté iluminado todos los días.