Un momento agradable
Ahora ya no me duermo mirando el techo. Desde hace pocas semanas cuando me meto en la cama pienso en el momento agradable del día. Me explico.
Hace poco pensé que sería saludable recordar los buenos momentos que uno vive cada día. Simplemente, para reforzar estos recuerdos.
Ayer, me fui a apuntar de un curso de deporte. Cuando llegue donde era, vi que había un cola considerable. Me puse en ella detrás de dos chicas que conversaban. La cola avanzaba rápidamente, en 15 minutos estaría fuera. Hubo un anécdota que hizo que el ambiente en la cola fuese agradable. Llego mi turno. Tras un "buenos días" y explicar mi intención, matricularme del curso, la secretaria me explico lo que tenía que hacer. Lo hizo con absoluta amabilidad, a pesar de que, posiblemente, llevase repetida esa frase una infinidad de veces en esa mañana. Me sorprendió lo agradable que fue. Incluso se permitió el lujo de despedirse de mí con un "Que disfrute del curso". Me aleje de la cola pensando que sin duda ese sería el momento agradable del día.
Porque por mucho que se señale a la monotonía como una muerte prematura, difícilmente viviremos dos días idénticos en nuestra vida. Cada uno tendrá su momento agradable.
Hace poco pensé que sería saludable recordar los buenos momentos que uno vive cada día. Simplemente, para reforzar estos recuerdos.
Ayer, me fui a apuntar de un curso de deporte. Cuando llegue donde era, vi que había un cola considerable. Me puse en ella detrás de dos chicas que conversaban. La cola avanzaba rápidamente, en 15 minutos estaría fuera. Hubo un anécdota que hizo que el ambiente en la cola fuese agradable. Llego mi turno. Tras un "buenos días" y explicar mi intención, matricularme del curso, la secretaria me explico lo que tenía que hacer. Lo hizo con absoluta amabilidad, a pesar de que, posiblemente, llevase repetida esa frase una infinidad de veces en esa mañana. Me sorprendió lo agradable que fue. Incluso se permitió el lujo de despedirse de mí con un "Que disfrute del curso". Me aleje de la cola pensando que sin duda ese sería el momento agradable del día.
Porque por mucho que se señale a la monotonía como una muerte prematura, difícilmente viviremos dos días idénticos en nuestra vida. Cada uno tendrá su momento agradable.
De nosotros depende disfrutar de él o no .
Comentarios
Dile a Felipe q le llamare en caso de emergencia, cuando me quede encerrada en algún baño.