quizá he chocolateado demasiado la leche
Las putas ocho de la mañana y el Señor Enthusiastic y Vaderetrocordero no tenemos otra cosa mejor que hacer que visionar "En Busca del Grial Potórrico". Cereales del desayuno mediante, hemos decidido escribir este post conjunto como primera experiencia de blog repetido (y punto) para dejar constancia gráfica de nuestras impresiones. Hemos de decir que hace apenas media hora que hemos abandonado la sala Asklepios (ya sabéis de que tipo de agujero estamos hablando), lo cual no ayuda a emitir un juicio saludable.
Sería díficil analizar las causas que nos han llevado a esta situación. Quizás nuestra condición de potorristas, o tal vez nuestras tendencias homosexuales. ¡Quién sabe! Pongámosles en antecedentes. Vaderetrocordero ha currado en la maravillosa y a la vez estresante Carvaca hasta las tres. Enthusiastic, por su parte, ha hecho acto de presencia en una boda. Principios divergentes con un final común. Maravilloso ¿no creen?
Después de mesarnos las barbas abundantemente (y soltar frases como: "A mí es que el alcohol luego me da hambre" o "Joe, junto con el muesli nos hemos chiscado un litro leche!") hemos llegado a la conclusión de que el Potorrismo guía nuestras vidas más allá de lo que hubiéramos podido imaginar. Que dos hombres hechos y derechos acaben desayunando juntos mientras ven este fantástico documento puede darnos una idea de hasta dónde puede llegar esta cosmogonía que es el Potorrismo. La expresión gráfica de este sentimiento se puede traducir en esta imagen tomada mientras observábamos el combate a muerte entre Milgrom y El Croupier:
"He perdido cualquier tipo de fuelle que tuviera", ha declarado Enthusiastic tras corregir este texto.
Sería díficil analizar las causas que nos han llevado a esta situación. Quizás nuestra condición de potorristas, o tal vez nuestras tendencias homosexuales. ¡Quién sabe! Pongámosles en antecedentes. Vaderetrocordero ha currado en la maravillosa y a la vez estresante Carvaca hasta las tres. Enthusiastic, por su parte, ha hecho acto de presencia en una boda. Principios divergentes con un final común. Maravilloso ¿no creen?
Después de mesarnos las barbas abundantemente (y soltar frases como: "A mí es que el alcohol luego me da hambre" o "Joe, junto con el muesli nos hemos chiscado un litro leche!") hemos llegado a la conclusión de que el Potorrismo guía nuestras vidas más allá de lo que hubiéramos podido imaginar. Que dos hombres hechos y derechos acaben desayunando juntos mientras ven este fantástico documento puede darnos una idea de hasta dónde puede llegar esta cosmogonía que es el Potorrismo. La expresión gráfica de este sentimiento se puede traducir en esta imagen tomada mientras observábamos el combate a muerte entre Milgrom y El Croupier:
Comentarios
Yo que acabo de llegar a casa tras una noche intensa (creo que dormire un rato) me encuentro con esta joya.
Preparense señores, porque la que vamos a montar en el electric weekend, va a ser más que importante!!
Se nota de qué lado están ustedes, que comen muesli en lugar de porras y salen hasta las mil en lugar de quedarse bebiendo claras en casa mientras ven "noche de fiesta".
La boda de de unos muy amigos mios y el final de fiestaca guiado por el guru Vaderetro fue una combinación sublime!
Y señores, todavia queda el domingo!!!
El muesli… es bueno, bueno, pero a esas horas un chocolate con unos churros… ¡tampoco tiene precio!
Lo de el chocolate con churros creo que se nos hubiese quedado grande :)
Coño, ni Liam y Noel en sus mejores momentos.