Irene la pizpireta
¿Cómo podemos averiguar que es el verdadero amor? Nuestros popes y maestros nos dicen desde pequeñitos que leamos y leamos, que no hay mejor sitio que los libros para descubrir una descripción detallada y minuciosa del amor. Pues mire usté, ante algo tan importante como el amor, necesito algo más que una elecuente prosa. Necesito coherencia de vida.
Flaubert, el autor de Madame Bovary, escribió novelones sobre el amor aun siendo un putero reconocido. Tolstoi, en su época mujeriega, dió grandes sermones por la contención y abstinencia en sus libros. Jack London, autor de Colmillo blanco y otras grandes aventuras norteñas, apenas salió de su región en su vida y murió alcohólico y picoto.
Viendo la hipocresía imperante en la literatura oficial, uno decide tomar el mismo camino que ante las soflamas anti-anti-conceptivas de los prelados de la iglesia. No escucharles lo más mínimo. ¿A quien escuchar pues?
A mis compañeros de piso. Abel, marxista de renombre mundial (pero trotskista, oiga!), es uno de los mayores potórricos ever. Hará apenas un mes tuvo la mala suerte de dar plantón a su última conquista. Ella, mujer intempestiva, de esas que se quitan las bragas a pedos, decidió mandarle a tomar por culo sin fianza ni derecho a réplica.
Lejos de amilanarse o peor aún, de entrar en retórica literaria, Abel decidió ponerse manos a la obra y grabarle una épica película, para recuperar a su amada.
Flaubert, el autor de Madame Bovary, escribió novelones sobre el amor aun siendo un putero reconocido. Tolstoi, en su época mujeriega, dió grandes sermones por la contención y abstinencia en sus libros. Jack London, autor de Colmillo blanco y otras grandes aventuras norteñas, apenas salió de su región en su vida y murió alcohólico y picoto.
Viendo la hipocresía imperante en la literatura oficial, uno decide tomar el mismo camino que ante las soflamas anti-anti-conceptivas de los prelados de la iglesia. No escucharles lo más mínimo. ¿A quien escuchar pues?
A mis compañeros de piso. Abel, marxista de renombre mundial (pero trotskista, oiga!), es uno de los mayores potórricos ever. Hará apenas un mes tuvo la mala suerte de dar plantón a su última conquista. Ella, mujer intempestiva, de esas que se quitan las bragas a pedos, decidió mandarle a tomar por culo sin fianza ni derecho a réplica.
Lejos de amilanarse o peor aún, de entrar en retórica literaria, Abel decidió ponerse manos a la obra y grabarle una épica película, para recuperar a su amada.
Comentarios
Abel eres un crack !!
aun me acuerdo del "por un poco que espere no va a pasar nada"
animo!!!
Como se lo ha currado el Abel, si luego la chica no vuelve es para matarla.
Desde luego vuestra casa es un yacimiento de inspiraciones tontunas, que coméis ahí?
Estoy llorando de la emoción.
Deeeeeevueeeeeeelveme laaa viiiiiiida!!!!
Además que alegría ver a Abel y a Rabee (¿?) de nuevo.
Grande el video sin duda!
desde luego yo volvería, ¡ánimo Abel!
Una obra digna de reconocimiento internacional!
Olé!
Fra B.
Grande Abel
Lauri