Follabilidad entre fogones

Hace algún tiempo Portrait presentaba el termino follabilidad como uno de los pilares del Potorrismo. Un camino que nos conducirá al amor.

Esta caracteristica fundamental de cualquier potorrico o potorrica debe ser trabajada constamente, en todo lugar y condición. No hay excusa que valga. Algunos mejoran su inglés, otros aprenden a dar masajes y uno mejora sus dotes culinarias.

Así es amigos, durante esta última temporada he focalizado la ampliación de mi follabilidad en la cocina. Pero no se equivoquen no quiero aprender a cocinar; NO. Al igual que no sirve de nada saber decir mocasines en inglés, saber hacer unas lentejas no aumenta tu follabilidad por muy ricas que te salgan o por mucho que molen tus mocasines

La follabilidad va más allá. Es la grandeza de encontrar la parte amorosa de todo. Sacar amor de un pedo es posible (que se lo pregunte a Portrait).

Con este empeño me propuse hacer de los fogones una herramienta potorrica. Y he de anunciar grandes avances, que paso a comunicar a continuación.

Mi primer resultado lo he titulado: "Champiñones a la Heineken". (Fijense como simplemente el nombre ya hace esbozar una sonrisa).

Como se imanginarán, efectivamente, mi creación lleva ... champiñones. El momento de creación fue un estallido de entusiasmo sin precedentes: llevar la gastronomía al terreno del Potorrismo. Contemplen mi creación.

Es cierto que no he testeado mi creación con ningún sujeto potorrico. Pero todo anuncia un éxito seguro. (Además, beneficiándonos de los poderes inhibidores del alcohol).

Pero sé que todavía me queda mucho que recorrer... pronto nuevos avances.